domingo, 23 de octubre de 2016

Otro poema nuevito para ustedes

Golondrina

Ayer salí de mi casa, yo creí que por buscarte,
mas pronto confundí mi rumbo
y me vi en una cantina
donde sonaba una canción
que me repetía tu nombre.

Hoy te buscaba otra vez, y sin salir de mi casa;
ahí sí que te hallé
metida en mis pensamientos
pero un recelo me inquietó:
¿eras tú, o era el dibujo que de ti me fui trazando
porque es más fácil mentirse cuando nos falta valor?

Luego tomé una guitarra que nunca he sabido tocar:
intenté pulsar un tono, un acorde
que no me suene a mentira;
la nota que no se traicione,
la voz honesta de un sol.

Y ahí estás, en la búsqueda infinita,
en el trino de la cuerda
que algo quisiera decirte.

¿Y en el sublime misterio
que anida bajo los puentes?
Sí, ahí te encuentro, eso es lo que ando buscando:

el pájaro imposible
cuyo vuelo nadie alcanza,
nadie puede.



2 comentarios:

Laura Jiménez dijo...

Mi querido poeta anda usted enamorado.

Javier Muñiz dijo...

Hola Agustín, llegó nadando cruzando un charquito para arrimarme a la orilla donde tus letras invocan ayeres sin final...puro amor verdadero.
Muchas gracias maestro, un lujo leerle y aquí me quedo para contemplar tanta belleza.
Pase usted buena noche..besos abismales...


P.D Mañana vía email le daré las gracas por sus palabras...ahora teniendo aquí en mi Asturias la noche cercana he de hacer de cocinero para la familia.....uno tiene tantos dones.....( metáfora)

Javier Muñiz.